PARQUE DEL MANZANARES:
Una de las cosas que más me gustan de Madrid, es que no se ha olvidado de proveer áreas verdes y de ocio para cada uno de los habitantes de los diferentes barrios de esta ciudad y me he querido dar la tarea de ir descubriéndolos poco a poco
En esta oportunidad quise recorrer mi río favorito que es el Río Manzanares, así que cogí mi bicicleta y recorriendo toda la orilla del río, que ya es un placer huir del bullicio y contaminación de la ciudad, inicias a disfrutar de la naturaleza de este precioso río
Para entender un poco mejor la naturaleza del Manzanares vamos a decir que es un río que discurre íntegramente por la Comunidad de Madrid (España), nace en la sierra de Guadarrama, pasa por la ciudad de Madrid y desemboca en el río Jarama, después de un recorrido de 92 kilómetros.
En su recorrido urbano, el curso del Manzanares es el resultado de décadas de trabajos de canalización y represamiento, si bien en 2016 se devolvió el nivel del río al caudal original a la altura de Madrid mediante la apertura de las compuertas reguladoras, lo que produjo un incremento de la diversidad biológica en este tramo.
El Manzanares ha sido tradicionalmente considerado un río de escaso caudal, sin embargo tiene mucha historia y se pueden encontrar vestigios tan increíbles como el Cerro de la Gavia, propiedad de Adif, el cual goza de protección arqueológica, ya que, sobre él, se conservan los restos de uno de los poblados carpetanos más importantes de la Comunidad de Madrid.
En el tramo final del Manzanares en los términos de la Capital encontramos el Parque Lineal del Manzanares donde se encontraron varios yacimientos romanos. En ella se han encontrado restos de muros y pavimentos, así como algunos trozos de mosaico, además de diversos objetos de bronce, monedas, cerámica y metales. Uno de los descubrimientos más destacables fue la cabeza de una estatua de alabastro, la cabeza de Sileno. También podemos encontrar restos de la época de los Borbones, quienes pretendían hacer navegable el río Manzanares. Para ello se construyó un canal paralelo al río el cual, partiendo del Puente de Toledo extrajera sus aguas de aquel y, mediante esclusas, permitiera la navegación de pequeñas barcazas.
Durante la Guerra Civil Española a finales de 1936, en plena batalla de Madrid, hasta el final de la Guerra en 1939, el tramo del río Manzanares que discurre por el Parque hizo de foso natural de contención para el avance de las tropas sublevadas de Franco, situándose en su entorno la línea de la defensa republicana. Desde Vallecas y Villaverde hasta Rivas-Vaciamadrid se excavaron kilómetros de trincheras y diversas posiciones defensivas que en algunos casos fueron el escenario de violentos combates en la margen derecha del río.
Después de todas las épocas de gloria, el lugar que ocupa este parque, quedó en el olvido hasta reducirlo en vertederos ilegales y usos incontrolados de este vasto y frágil espacio natural e histórico.
No fue sino hasta inicios del siglo XXI que se iniciaron las obras de restauración de este parque, iniciándose a reconstruir por fases por lo que se dejó el diseño a Ricardo Bofill, posteriormente se encargó la construcción de la gran escultura de la Dama del Manzanares; escultura urbana situada en el punto más alto del Parque Lineal del Manzanares, una zona ajardinada de 35 hectáreas. La obra fue realizada en bronce y acero en el año 2003, a partir de un diseño del artista valenciano Manolo Valdés.
Mide 13 metros de altura y pesa aproximadamente 8 toneladas. En el parque hay dos miradores interesantes. Uno es el mencionado de la Atalaya, el más próximo a la capital, desde donde se suelen hacer las fotos panorámicas de Madrid. Se sube por una larga escalinata de 181 escalones y alcanza los 21 metros de altura. Representa la cabeza de una mujer, con el rostro orientado hacia el norte, esto es, hacia el casco urbano madrileño. Está dedicada al río Manzanares.
En 2005 fue inaugurado un sistema de iluminación, que consta de 24 proyectores, cuyas tonalidades cambian con cada estación.
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